Soco Cordente : "Detesto los tabúes y la invisibilidad"
Soco Cordente nació un 23 de marzo de 1985 en la ciudad de Cuenca. Actualmente, está finalizando sus estudios de Educación Social en la Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación de la UCLM. Aunque ya lleva trabajando como educadora de forma voluntaria desde hace más de un año gracias a la Asociación Sociocultural La Maleta Nómada, de la cual es vicepresidenta, y donde su finalidad es fomentar la educación, la solidaridad, el arte y la cultura. También forma parte de la junta directiva del Ateneo científico, artístico y literario de la ciudad de Cuenca. Su afición por la literatura y escritura surgió siendo muy niña, pero por cuestiones de la vida aparcó casi por completo algo que más tarde se convertiría en otra pasión que permaneció dormida durante años y gracias a un hecho concreto despertó. Fue en el año 2013, al centrarse en canalizar sus emociones a través de sus escrituras compartiéndolas en los medios sociales, cuando comprobó que lograba transmitir bellas sensaciones entre sus lectores, que se sentían identificados con sus escritos y de ahí decidió recopilar estos relatos y dar el paso de publicar Encuentros entre notas discordantes (Círculo Rojo, 2013).
- ¿Cómo ha sido siempre tu relación con la literatura?
Sinceramente, hasta hace pocos años, no tan estrecha como me hubiese gustado.
El contacto con la lectura y escritura desde pequeña era casi a diario, me crié entre libros, también en la adolescencia hacía algunos pinitos escribiendo cosas que se quedaban para mí o realizaba leyendas y trabajos para la asignatura de literatura muy gustosamente. Devoraba los clásicos por mi cuenta. Pero a los 15 años algo ocurrió y tomé un desvío equivocado, incluso una especie de animadversión extraña hacia la literatura y en ese trance, hasta los 26 años dejé de leer por completo y de escribir… Algo que hoy en día echo de menos, el no haberme empapado de la lectura y escritura por los cuatro costados, de ese modo me hubiese ayudado mucho ahora a la hora de escribir más fluidamente, pero no es tiempo de lamentaciones, creo fehacientemente que todo ocurre en su debido momento y todo tiene su porqué, nunca es tarde para retomar pasiones, a las pruebas me remito…
- ¿Qué supone escribir para Soco Cordente?
En primer lugar, siempre he escrito y sigo haciéndolo por y para mí, para extraer emociones que me oprimen el pecho y que se diluyen plasmándolas, es un desahogo, aunque en mi libro hablo en un gran tanto por ciento de realidades, a través de la escritura también puedo crear los mundos en los que me gustaría estar en ciertos momentos, es un modo de evasión cuando las heridas escuecen o un modo de gritar la felicidad cuando en el mundo tangible nadie es capaz de comprenderte. Lo expreso todo a través de esta vía. Sin sentir emociones verdaderas me sería muy complicado, por no decir imposible escribir.
- ¿Qué tiene el relato (como género) que le atrae tanto?
Cuando comencé a escribir de forma seria, encontré en el relato una forma de contar diferentes historias, en Encuentros Entre Notas Discordantes había muchos temas qué tratar y compilarlos en una novela y encima siendo autora novel me hubiese resultado complejo además de darme gran respeto. Me atrae el relato, de este modo puedes decir mucho con pocas palabras, cambiar de tercio sin seguir una cronología… son muchos los factores.
Ejemplar de la segunda edición de Encuentros entre notas discordantes (actualmente ya hay 3ª).
Fotografía : BimProducciones.
- En Encuentros entre notas discordantes se tratan temas casi tabú para la sociedad como la sexualidad o las adicciones. ¿Por qué tratar estos temas tan “incómodos” en sus relatos?
Por eso mismo, porque detesto los tabúes y la invisibilidad. Parece que en esta sociedad todos queremos dar nuestra mejor cara y esconder “la basura” (totalmente lícito) pero sobre todo, hace tiempo que me di cuenta que la gente se cohíbe por el “Qué dirán” se reprimen y caen en el absurdo mundo de las apariencias, de llevar una doble vida, una doble cara. Por ejemplo, con el tema de la homosexualidad, en este caso, la que trato en el libro es la homosexualidad femenina, creo que aunque se han dado grandes pasos, todavía está muy silenciada, muy estereotipada, no hay la visibilidad suficiente para que se trate con total normalidad y en parte, eso es lo que pretendo cuando creé en el libro relatos sobre ello. Y sobre el tema de las adicciones, hay una gran estigmatización, todos vemos la punta del iceberg, a la persona malherida por ciertas patologías donde hasta se crea una exclusión social, pero la mayoría de la gente no se para a pensar ni les preocupa ver la gran placa de hielo que hay debajo de eso. Lo que han pasado estas personas en sus vidas para llegar a cierto punto… Pretendo hacer un ejercicio de empatía y a los que lo están sufriendo, como persona que también lo sufrió, un mensaje para decirles que no todo está perdido pese a que el túnel sea largo y oscuro, que hay esperanza y que se puede salir, siempre y cuando la persona esté dispuesta a querer sin excusas por muy mal que la vida le haya tratado.
- Sin embargo, el libro ha recibido un premio y ha sido un éxito en el público…
Estamos hablando de que entre casi 2.000 publicaciones sacadas en 2016 en la Editorial seleccionaron a Encuentros entre notas discordantes para optar al premio Círculo Rojo en la categoría de relatos, eso ya es un premio en sí que no entraba en mis planes, y encima recibirlo en un Auditorio abarrotado, en este caso, el Auditorio Maestro Padilla de Almería, con las felicitaciones públicas de figuras como Juan Ramón Lucas… va mucho más allá de lo que podía esperar, siempre tuve ilusión y motivación con el libro, y la sigo teniendo pero nunca tuve ambición con él. Pese a ser una persona que en muchas ocasiones cae en utopías, en este caso, siempre tuve y tengo los pies en la tierra pero pese a ello no dejé de trabajar ni un solo día. Desde que salió me dediqué a recorrerme varios sitios de España para darlo a conocer con presentaciones o firmas, ese ha sido “el secreto” el continuo movimiento, el sacrificio de apostar por algo, el dejar el ego completamente de lado… el ver en una presentación a sesenta personas y otro día ver a cuatro y seguir adelante sin desplomarse.Ese premio marcó un antes y un después en mi vida por muchos motivos.
Por ejemplo, y permíteme que te cuente algo sobre esto, y es que gracias al premio, cambió mi vida más en el sentido personal que incluso en el profesional y es que ahí me di cuenta realmente de la gente que me rodeaba. Estamos acostumbrados a que cuando las cosas te van bien, todo el mundo se acerca, incluso salen “de la nada” aparte de ocurrirme eso, también me ocurrió a la inversa, mi gente, algunos de los que consideraba amigos desde hace como unos diecisiete años, comprobaba cada vez que cuanto mejor me iban las cosas con el libro más importancia le quitaban, menos me escuchaban, menos me preguntaban… Estaba realizando un trabajo y llevándome unos reconocimientos que pasaban desapercibidos totalmente para ellos. Personas que yo ni nadie podría imaginar conocidas en el mundo del Arte, me realizaron celebraciones por la nominación, se alegraron como si de ellos mismos se tratase, en cambio, algunos de mis propios amigos no le dieron ningún valor pese a ser conscientes de lo mucho que he trabajado, me hizo recordar el “Síndrome de Procusto” hay gente que te rodea que le gusta y se alegra de que te vayan bien las cosas, y en cierto modo algunos se alegraban a su manera, pero cuando ya te van demasiado bien, algo ocurre ahí… y simplemente me marché, cerré una larga etapa de mi vida.
No es cuestión de que te estén aplaudiendo a cada paso que das, es simplemente algo mucho más sencillo que eso, es de lógica, lo que se supone que es “lo normal” pero hacía ya años que estábamos en Universos paralelos y que hablábamos distintos idiomas. De hecho, cuando me despedí de ellos, uno de los que más quería me dijo literalmente: “ya volverás cuando te tengamos que recoger de los retretes” (haciendo alusión a los problemas que tuve en el pasado con el alcohol sabiendo por las desgracias y sin sabores que había pasado a causa de esto) esos fueron sus reproches al marcharme de sus vidas, incluso dándome a pensar que en parte, se alegrarían si eso ocurriese para convertirse en “mis salvadores” hay personas que a las que les encanta sentirse Héroes, pero es que ni siquiera fue el caso, yo me metí sola en aquello y sola salí. Pienso que si de verdad hay una amistad, por mucho que haya alguna discusión, algún malentendido, decir algo así me parece de una bajeza tremenda. Pero de todo se aprende y hay que pegar portazos cuando la vida así lo requiere.
Hoy por hoy solo quiero gente que me sume y no me reste, de la que pueda aprender, con la que pueda tener una conversación y no ser un mueble que escucha mientras otros hacen monólogos. Pero vamos a mirarlo de forma frívola y con un toque de humor, al menos en el próximo libro tendré más hueco para escribir suprimiendo largas listas de nombres en los agradecimientos… (Risas)
- ¿Por qué dividir su libro en “rutas dispares”?
Porque al haber tantas temáticas tan diferentes entre sí, sino las dividía, en el libro no se iban a entender, aparte en la sinopsis dejo al lector como una especie de juego y esto es que les propongo leer cada ruta según su estado de ánimo: ¿Que un día están más sensibles? Pueden ir a la ruta del amor, ¿un día les apetece algo de adrenalina? Pueden ir a los relatos eróticos, ¿Que tienen una tarde con el espíritu en rebeldía? Pueden ir a las críticas sociales y así sucesivamente… También aunque aparentemente son “dispares” todas tienen algo en común que llegan a un fin, a un “regreso a casa”
- ¿Cuál es la función de lo musical en el libro?
Hay una ruta que habla de la Música, yo soy una melómana empedernida, de hecho, si pasa más de un mes y no he escuchado música en directo es como si me faltase algo… Mira, por ejemplo, en mis presentaciones le pido al público, a los que se animen, que nos digan cual es la canción que marcó su vida y porqué, pues con esto han salido a flote emociones titánicas, es de las partes preferidas de las presentaciones, incluso algunos se animan a cantárnoslas, y hay historias detrás tremendamente bellas o tremendamente dramáticas. La música marca un filtro en las etapas de nuestra vida, pues más o menos de ello trata esta ruta, de cómo ciertos personajes después de historias que el lector no se espera darán con finales que tampoco se esperan, cuando comiencen a leer algunas, se sorprenderán, seguro. (La mayoría de los que ya los han leído así me lo han hecho saber) también haciendo autocrítica, de esa ruta, al menos hubiese eliminado dos… por ello, me gustaría que el lector no se eche para atrás si alguno no es de su agrado, que lo deje y que comience con otro, porque realmente hay varios ahí que merecen la pena. También hay mucha inspiración gracias a artistas que son imprescindibles en la discografía de mi corazón, de hecho en los agradecimientos no pude olvidarme de Enrique Bunbury, Luz Casal, Eva Amaral, Najwa Nimri y Mónica Naranjo, en especial a estas tres últimas por detalles que han tenido conmigo impagables. Tengo muchos defectos pero entre las pocas virtudes es la de ser muy agradecida.
- ¿Que supuso para Soco Cordente ganar el Premio Círculo Rojo de Relato?
Algo que pensé que jamás ocurriría, volviendo al tema personal, todavía no sé cómo fui capaz de subirme al escenario a recogerlo y dar un discurso, puesto que hace tan solo tres años, no más, era la persona más tímida del planeta, y por otro lado, estar hablando con el corazón abierto de par en par ante 1.000 personas en silencio ESCUCHÁNDOTE, aplaudiéndote y dándote con una gran sinceridad la enhorabuena… no se puede describir con palabras, aún más teniendo en cuenta que, aunque a veces no lo parezca, soy una persona altamente sensible, que vive muy intensamente tanto lo bueno como lo menos bueno. En esos momentos recordé mi pasado y no podía creer que de ser insultada, de ser el hazmerreír, de ser diana de dardos envenenados por los problemas que tuve y que he comentado antes, a ser respetada, como ha de ser, el respeto hacia las personas es algo que considero básico, seas lo que seas. Me sentí y me sigo sintiendo la persona más afortunada del mundo.
- ¿Cree que la literatura tiene que ser una herramienta fundamental de cambio social?
Por supuesto, lo creo, a mi juicio y como lectora, a mi no me valen los libros que solo sirven para entretener, me gustan los libros que hacen pensar y reflexionar al lector, que algo se despierte en ellos… He tenido la suerte de ver personas llorar de emoción en las presentaciones, o a otras de una cierta edad que me admiran porque me consideran valiente ya que en sus vidas no se atrevieron a dar ciertos pasos de los que en el libro comento, también hay gente que me hace saber que algo ha cambiado en sus vidas, sobre todo con un relato donde hago una crítica al conformismo en las parejas que ni siquiera se aman… ese relato es como una bofetada para algunos, pero una bofetada sana. Aunque al principio duele, porque las verdades duelen…
- Por último, ¿qué cree que otorga a un lector la lectura de Encuentros entre notas discordantes?
Esta última pregunta, aparte de lo que a mí me hacen saber por todo tipo de vías, me encantaría que la respondieran ellos…